Se trata de una modalidad de póliza en la que se paga en función de la edad del asegurado, y cada año, a medida que se hace mayor el asegurado, la prima va subiendo. Los jóvenes pagan primas muy baratas, que van creciendo con la edad.
Por su propia naturaleza, también se le denomina “Anual Renovable”. Porque en realidad se trata de un seguro anual, donde cada año se paga en función del riesgo del asegurado para ese año. Y es renovable o cancelable cada año.
En este sentido, se parece a un seguro de vida, en que cada año se actualiza la prima (el precio) en función del riesgo del asegurado (la edad).
Es la cuarta modalidad con mayor presencia (7,6%) de los contratos de seguros de decesos están hechos en esta modalidad.
Puede darse el caso que, llegados a cierta edad, ya no podamos hacer frente al coste creciente de este seguro, porque cada año es más caro. Si nos damos de baja, perdemos todo lo pagado en el pasado.
Por eso hay que vigilar mucho en la contratación de esta modalidad. Aunque algunas aseguradoras intenten vendérnoslo de jóvenes por el hecho de ser muy barato.